El gobierno se puso como objetivo poner a funcionar la operadora de carga Servicios Logísticos Ferroviarios el 1 de julio. Esta empresa pública que funciona en el derecho privado es una pieza fundamental de la reforma del ferrocarril que pretende impulsar el Frente Amplio.
Por eso se llevaron a cabo varias reuniones durante las últimas semanas. La última el jueves, entre los jerarcas del Ministerio de Transporte y el sindicato de trabajadores del ferrocarril. Los funcionarios de la Administración de Ferrocarriles del Estado (AFE) le propusieron al gobierno una modificación del decreto que creo la operadora en 2011 y esperaban una respuesta. Pidieron eliminar el artículo ocho que los transforma en trabajadores de derecho privado y modificar el artículo cinco para pasar a la empresa, junto con los bienes de AFE, sin perder su calidad de funcionaros públicos.
Pero el gobierno rechazó esta propuesta y les informó que a partir de la semana que viene hará un llamado para trabajadores que quieran incorporarse a la operadora. El ministerio también utilizará un decreto, aprobado en abril de este año, que les permite a los trabajadores pasar a Servicios Logísticos Ferroviarios y les reserva su puesto como funcionarios públicos.
Los trabajadores no están de acuerdo y se declararon en pre conflicto. “Esa posición del Gobierno, que intenta imponer por decreto una renuncia a los derechos laborales de los trabajadores, solo puede desatar un conflicto que no queremos, pero que no tememos enfrentar. Atentos a estos hechos que no tienen otra lectura que el rompimiento de las negociaciones por parte del ministerio y una evidente mala fe durante el desarrollo de la misma, el Consejo Directivo de la Unión Ferroviaria resuelve rechazar el intento de atropellar los derechos laborales de los trabajadores de AFE y repudiar la mala fe con que actuaron en la negociación”, dice el comunicado del sindicato emitido este viernes.
La operadora Servicios Logísticos Ferroviarios se creó por decreto en 2011 y se presentó dos años después. El nuevo presidente de AFE, Wilfredo Rodríguez, dijo a No Toquen Nada que hasta ahora no funcionó. “Por distintos motivos no se pudo poner en marcha, de hecho pasó el material rodante de AFE a la empresa Servicios Logísticos Ferroviarios, pero como no pudo funcionar, a través de un comodato el material volvió a AFE, que hoy es quien está facturando las cargas”, sostuvo.
En 2014, AFE perdió carga. Movió 800.000 toneladas, cuando su promedio histórico había sido de un millón, con un pico de millón y medio en 2013.
La principal dificultad para funcionar que tuvo la operadora es la falta de trabajadores, que se negaron siempre a trabajar en el derecho privado. Durante la gestión de José Mujica, dos resoluciones de asamblea de la Unión Ferroviaria mandataron a sus afiliados a no pasar a la empresa, que por ahora solo tiene funcionarios administrativos.
En Uruguay no hay formación para trabajadores ferroviarios. Los maquinistas, por ejemplo, se preparan dentro de AFE, en una carrera que lleva cinco años. Carlos Aramendi, presidente del sindicato de AFE, dijo que la operadora tampoco tiene posibilidad de traer trabajadores de Argentina o Brasil porque el sindicato realizó acuerdos para trancar esa posibilidad.
Pero el llamado del gobierno sería para incorporar maquinistas y los ferroviarios volverán a dar la pelea para que ningún trabajador ingrese. “AFE tiene hoy 156 maquinistas y muchas veces se anulan trenes porque no tenemos personal. El último llamado para maquinistas se hizo hace cinco años y hoy están ascendiendo a maquinistas de segunda. Ese es el tiempo que les lleva formarse”, dijo Aramendi a 180.
El Banco de Desarrollo (ex CAF) le aprobó a la operadora un préstamo de 45 millones de dólares a fines de 2014. Pero el presidente de AFE aclaró que no van a recibir el dinero hasta que la empresa esté en marcha.
La vuelta al diálogo entre trabajadores y gobierno eran una novedad de esta administración. Eso también es destacado por los trabajadores en su comunicado. “El anterior Ministro, Enrique Pintado, puso mil obstáculos o directamente se negó a negociar. Desde Presidencia se nombró un negociador, el Señor Julio Baráibar, pero todas las propuestas y fórmulas presentadas en esa mesa de negociaciones terminaban trancadas por los Ministerios de Transportes y o de Economía. Con el actual Ministro, el Señor Víctor Rossi, comenzamos a negociar varios meses antes que fuera nombrado en el cargo. Siempre estuvo presente que la negociación se basaba en buscar la forma jurídica que permitiera que los actuales trabajadores de AFE pudieran prestar servicios a Servicios Logísticos Ferroviarios sin perder ni por un minuto su carácter de trabajadores públicos”, afirmaron.